¡Amigas peligrosas! Fue a la casa de su íntima a un convite y un tipo la mató por no aceptar tener sexo.
La nota roja. Ecatepec, Méx.- Adolescente de 16 años de edad fue a cenar a la casa de una amiga y un invitado al calor de las copas le pidió hacer el sexo, pero como lo rechazó la mató. ¡Aguas padres de familia! Fíjense a dónde dejan ir a sus hijas, porque ya ni la casa de las amigas es segura. No importa que se enojen, pero primero su seguridad.
Déjenme contarles que hace unos meses, mi hija se molestó con su madre porque no la dejó quedarse en una fiesta en la casa de una amiga. Sumamente encolerizada mi joven retoño acusó a la autora de sus días de ser una exagerada y no tenerle confianza, a lo que mi señora esposa le contestó, que no era falta de confianza hacia ella sino que no conocía a la familia donde pretendía quedarse y mucho menos a los amigos de su compañera que la había invitado. Esa vez estuve de parte de mi hija, pero hoy, al enterarme de lo que le sucedió a una adolescente en la colonia Luis Donaldo Colosio, le doy toda la razón a mi mujer.
La historia que a continuación leerán está basada en la narración de Miguel Angel Serrano, reportero del periódico El Universal (entrecomillados) y datos de la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Ecatepec). Cito fuentes para quienes nos escriben y se inconforman de lo que publicamos; nosotros no inventamos, difundimos el parte policiaco y si quieren que también hagamos lo mismo con la versión de los acusados pues que esperan para mandárnosla.
Por cierto a quienes nos escriben comentarios con amenazas por publicar información de las detenciones de la policía, les sugiero que en lugar de buscar amedrentarnos, aporten pruebas de la inocencia de quienes consideran que son detenidos injustamente y con mucho gusto las publicaremos, pero recuerden nosotros sólo informamos, quien decide si alguien es culpable o no, es un juez.
Pero regresemos a la dramática noticia del asesinato de la adolescente en la colonia Luis Donaldo Colosio, la cual publicamos no por morbo sino como una llamada de atención a las adolescentes confiadas en las amigas y a los padres de familia que no se preocupan por saber adonde y con quienes van sus hijas. En fin, esta es la historia:
“La víctima había asistido a una reunión en casa de los padres de su amiga Anayeli, de 17 años de edad, ubicada en el número 4 de la calle de Duraznos, en la colonia Luis Donaldo Colosio, donde dos jóvenes más asistirían para celebrar con bebidas embriagantes y música”. (El Universal: 27/08/2007)
Anayeli invitó a cenar a su novio Arturo, pero como éste llevaría a un invitado (Rigoberto), le habló a la hoy occisa para que la acompañara en la tertulia, quien gustosa aceptó sin que por un momento le pasara por la mente que sería su última noche con vida.
Según dijeron los protagonistas de este drama, “Pasada la medianoche, Rigoberto pretendió a la invitada con alardes de golpeador y le mostró una pistola calibre 22 para impresionarla”, pero “la víctima optó por no hacer caso”.
A Rigoberto no le gustó el desaire y “le apuntó con el arma en la cara para obligarla a tener relaciones sexuales”, pero nuevamente fue rechazado, por lo que le disparó en pleno rostro.
La adolescente murió en seguida y para desatenderse de su crimen Rigoberto, acompañado de su amigo Arturo, “arrastraron a la víctima por una avenida sin pavimentar hasta abandonarla en la calle Felipe Carrillo Puerto esquina con avenida de las Torres a escasos 300 metros de la vivienda”.
Pero alrededor de la 01:00 horas, la policía municipal recibió un reporte de una mujer lesionada por arma de fuego en la avenida Carrillo Puerto y avenida Las Torres, por lo que se trasladaron al lugar las unidades 09, 10 y 441, informó el jefe de primer sector, Enrique Sánchez.
Al llegar al lugar, la policía municipal encontró a dos jóvenes de 16 y 18 años de edad, Arturo y Rigoberto, quienes se encontraban junto al cuerpo de la menor. Los jóvenes habían llamado a la policía para despistarla, pero al ser interrogados se pusieron nerviosos y terminaron confesando el crimen.
Al lugar arribó la unidad 2010 de Protección Civil al mando de Juan Carlos Galván Alvarado quien certificó el deceso de la menor y de parte del ministerio público llegó Raymundo Ortiz y el doctor Alfredo Rodríguez quienes levantaron el cuerpo.
Por su parte, la policía municipal se trasladó a la casa donde fue asesinada la menor, donde, según publica el Universal, encontraron una pistola tipo escuadra calibre 22, marca Astar, matrícula 25635720, serie F458287, USA con la cual se cometió el asesinato, los zapatos de la víctima y rastros de sangre, los cuales trataba de limpiar Silvia, hermana de Anayeli.
La policía municipal detuvo a los 4 protagonistas de este crimen, Rigoberto Alejandro Barrón Montes, Arturo Torralba Hernández y a las hermanas Anayeli y Silvia Bravo Cortéz, a quienes puso a disposición del ministerio público de San Cristóbal, donde se inició la averiguación EM/1038/07 por homicidio.
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